Considerado como un dios, el elefante es un animal sagrado y venerado desde hace más de 5.000 años. En el nacimiento del mundo, Brahma – dios creador en la religión hindú – creó a Airavata, antepasado de los elefantes y el primero en salir de la concha fundadora del dios. Sus poderosas piernas serán los cuatro pilares que sustentarán el peso del universo. Más tarde, la montura de Indra, divinidad hindú que preside el rayo y la guerra, estará representada por un elefante.
En la mitología hindú, la cabeza de elefante del dios Ganesha es el resultado de una espantosa tragedia. Hace mucho tiempo, la diosa Parvati, esposa de Shiva, dio a luz a Skanda, su primer hijo. Fue tal su alegría, que de sus senos empezó a manar leche sagrada. Con la mezcla de ese néctar divino y la pasta de sándalo con la que se untaba el cuerpo, la diosa modeló a su segundo hijo, Ganesha, a quien confió la protección de su palacio. Lleno de celo, Ganesha impidió al mismo Shiva que accediera a la morada de su esposa.
Presa de una cólera terrible, Shiva cortó allí mismo la cabeza del joven testarudo. Parvati, desesperada por este acto de barbarie, amenazó con destruir todo el universo. Para apaciguar el rencor de su esposa, Shiva le prometió que cortaría la cabeza de la primera criatura que pasara cerca del palacio y la colocaría en el cuerpo del divino niño. Esa primera criatura fue un elefante que paseaba por el lugar y así es como terminó con una cabeza de elefante encima de un cuerpo de niño.
Con su vientre rechoncho y su aire bonachón, suscita la simpatía popular. Protege el hogar y trae suerte en las empresas comerciales, por lo que se le suele ver en los comercios y encima de la puerta de las casas. Ganesha también es la divinidad de los estudios y de los intelectuales: es el símbolo del conocimiento, y los estudiantes indios lo invocan para aprobar sus exámenes. Asi mismo, representa la armonía entre el hombre y el universo en una simbiosis perfecta.
Este dios sonriente siempre aparece acompañado por su montura preferida, un ratón. La fuerza del elefante queda así asociada a la habilidad del minúsculo roedor, una alianza inédita destinada a vencer todos los obstáculos de la existencia.
El aniversario del nacimiento de Ganesha se celebra con una gran fiesta anual festejada por todos los hinduistas del mundo. El Dios elefante es muy glotón, razón por la que se le presentan numerosos alimentos. Esas montañas de vituallas, que se acumulan en su honor, se transportan seguidamente hasta las orillas del océano Índico o se lanzan a las olas, para que se hundan junto a Ganesha.
Qué bueno el artículo
Gracias
Exelente informacion sigo aprendiendo.
Que historias más curiosas.